Un auténtico Pomelo en versión cannabis, para los amantes del sabor amargo, dulce y cítrico de esta fruta.
Grapefruit es un híbrido autofloreciente y feminizado, muy productivo y potente. Proviene del cruce entre fenotipos de Ruderalis canadiense y un clon de la Sour Citrus de Vancouver. Para los amantes de los cítricos, cultivar esta variedad es una maravilla, pues desprende aroma a limón, naranja amarga y pomelo durante todo su ciclo. Se trata de una planta bastante pequeña, que no supera los 90 cm, a pesar de su corto tamaño, forma un tronco grueso en medio, con ramas laterales secundarias cubiertas de cogollos, compactos y resinosos.
Su sabor es muy dulce, con retrogusto amargo al paladar. En pocos segundos induce a una alta estimulación cerebral muy bien equilibrada, y tiene un gran impacto calmante en el cuerpo, sus fans aseguran que es una variedad ideal para fumar durante el día pues cambia el estado de humor y agudiza los sentidos.