Black Valley procede de las cordilleras del Himalaya.
Es el resultado del cruce de dos índicas muy estables, concretamente de una variedad Double Glock polinizada con una Kush con sabor a vainilla.
Black Valley tiene un efecto relajante, potente y duradero, por lo que es muy indicada pàra su uso terapéutico ya que ofrece un efecto instantáneo.
Con una floración de nueve semanas es necesario una cantidad de nutrientes elevada para obtener un resultado óptimo con la formación de grandes cogollos e intensos aromas afganos, y obtener así una producción alta.