El PH (o potencial hidrógeno) es una medida que nos indica el grado de acidez o alcalinidad de una disolución. Se dice que un PH es neutro cuando su valor es 7.0, es ácido si es menor que 7.0 y es básico o alcalino si es superior a 7.0. En cultivos de marihuana, el PH ideal se establece entre 5.5 y 6.5, aunque siempre hay variedades que soportan mejor unos valores por encima de éstos. Gracias al PH, hacemos que los nutrientes estén disponibles fácilmente para la planta. Por encima o por debajo de los valores óptimos, las plantas tienen dificultades para asimilar determinados elementos y pueden aparecer las típicas carencias de nutrientes aunque el sustrato esté cargado de ellos.
El PH se mide con un potenciómetro o Ph-metro analógico o digital, que nos dará una medida precisa de su valor. Otros como los test reactivos o el papel tornasol, son efectivos pero menos precisos, algo imprescindible en cultivos optimizados. Para estabilizar el PH del agua, debemos hacerlo después de añadir los abonos que usemos y usaremos un "buffer" para subirlo en caso de que esté bajo (con un PH Up) o lo bajaremos en caso de que esté alto (con un PH Down) hasta conseguir los valores óptimos. Es muy importante regular el PH en todos los riegos para evitar fluctuaciones en el sustrato que afecten a la nutrición de las plantas.
En Cannabislandia contamos con una amplia gama de buffers de las mejores marcas, tanto para fases de crecimiento, como para floración. No te la juegues con algo tan fundamental e importante como es el PH!