Usa depósitos con capacidad suficiente en función del número de plantas. A medida que las plantas crecen, el pH y la EC del depósito pueden cambiar. Generalmente el pH subirá, así como la conductividad eléctrica. Cuanto más pequeño sea tu depósito, más pronunciada será esta diferencia. Por ejemplo, si has ajustado el pH a 6 y la EC a 1,8 al encender la iluminación; cuando apagas la iluminación tu pH puede ser 6,3 y tu EC puede llegar a 2,0. Como norma general debes elegir un depósito que no pierda más del 20% de su volumen total durante un día (un 10% incluso mejor). Los cultivadores expertos saben que cuanto mayor es el depósito mejor. Los depósitos grandes también se mantienen frios durante más tiempo.