Desde que en el año 2013 y bajo el mandato en la presidencia del bueno de José Mújica, Uruguay se convirtiese en el primer país del mundo en regularizar tanto la producción como la compra-venta de marihuana mediante un decreto ley que prevé su uso científico, medicinal y terapéutico, hasta ahora a sido una incógnita saber cómo, cuándo y bajo que condiciones se dispensará.
Según se ha podido saber estos días y según declaraciones del secretario general de la Junta Nacional de Drogas, Milton Romani, el cannabis se podrá adquirir de manera legal a partir de agosto, así que buena noticia. También se sabe que se dispensará en principio tan sólo en farmacias habilitadas, que podrán almacenar una cantidad que aún no se ha dado a conocer y que en ningún caso estará a la vista del público.
El cannabis se venderá en bolsas de 10 gramos que no contendrán ningún tipo de publicidad, siendo además el límite al que tendrán acceso los uruguayos o residentes en Uruguay, 40 gramos al mes. También cada bolsa informará de los efectos y de la composición de los principales cannabinoides, así del valor medicinal de cada variedad concreta.
Aunque en principio como decíamos sólo se podrá comprar en farmacias «porque el gobierno no quiere promover el consumo sino regularlo», la Junta Nacional de Drogas no cierra las puertas a que otro tipo de establecimientos también puedan dispensarla en un futuro para que sea accesible a todo el que quiera y se haya inscrito en un registro, por lo que también aflorarían otro tipo de negocios al más puro estilo californiano u holandés. En el plan piloto que comenzará en unas semanas y con el que se pretende empezar la implementación del cannabis en Uruguay, de momento hay inscritas tan sólo 50 farmacias de un total de las 1.200 de todo el país, menos de las esperadas, y es por ello que Romani apunta que «los que especulaban con que este gobierno no iba a aplicar la ley que se saquen eso de la cabeza porque vamos a vender en farmacias o donde sea. Si las farmacias son un dolor de cabeza, venderemos por otros canales».
La distribución de la marihuana legal corre a cargo de las empresas Iccorp y Simbiosys a las que el Estado uruguayo ha habilitado para la producción de cannabis recreativo. Aunque faltan unos días para conocer el precio de venta, las previsiones apuntan a que el gramo podría costar 1,2 dólares al público, mientras que los establecimientos lo adquirirían a 0,9 dólares.
En cuanto a la producción de cannabis medicinal, en principio aún no hay ninguna compañía con actividad, si bien se reconoce el interés de una empresa de Israel, que argumenta las facilidades legales con las que contarán y la posibilidad de exportarlo después. Además de que el cannabis medicinal aún se encuentra en proceso de estudio por parte del Ministerio de Salud de Uruguay, evaluando qué tipo de composición debe contener, en qué casos se emplearía y cual sería la demanda.
Pero el cannabis recreativo no será accesible a todo el mundo, ya que como señalaba Romani, sólo podrán adquirirlo los ciudadanos que se hayan registrado en las oficinas del Correo uruguayo y para lo que se requiere ser mayor de edad y ciudadano uruguayo, o extranjeros con un mínimo de dos años de residencia en el país. Las farmacias contarán con un dispositivo que mediante reconocimiento de huella dactilar, indicará a los inscritos la cantidad de cannabis que pueden comprar. Ese registro aún no está abierto pues se considera uno de los últimos pasos del lento proceso que pronto por fin será una realidad.