Cultivo

Pequeña gran guía para el cultivo hidropónico de marihuana

El cultivo hidropónico de marihuana está cada vez más extendido, lo que hace unos años parecía una tecnología futurista, hoy en día goza del reconocimiento de los mejores cultivadores. También es cierto que hoy en día el mercado de fabricantes de sistemas hidropónicos es inmejorable, cuando los primeros pioneros tenían que recurrir a fabricarse sus propios equipos, ahora existen todo tipo de sistemas hidropónicos para pequeños armarios o enormes invernaderos.

¿A quién no le llama la atención un cultivo sin tierra y directamente en agua? Los más novatos en el cultivo suelen mostrar asombro o incredulidad, aunque nada más lejos que la simpleza de un cultivo tradicional. Teniendo en cuenta que las plantas de marihuana necesitan luz, aire, nutrientes y agua para vivir, los sistemas de hidroponía ofrecen un total control sobre el riego y la alimentación, dos de los factores más importantes.

Pero qué es el cultivo hidropónico?

La palabra hidroponía procede del griego «hydro» (agua) y «ponos» (trabajo), es decir «trabajo en agua». No es en absoluto un método de cultivo inventado por el hombre, aunque sí es mérito nuestro el haber sabido adaptarlo al cultivo de cualquier planta. Los Jardines Colgantes de Babilonia supuestamente eran irrigados desde la zona más elevada hacia las más bajas. En zonas de China, Sureste Asiático, Egipto y América del sur, sin saberlo utilizaban la hidroponía para cultivar sus alimentos. Usaban medios para generar una balsa flotante donde situaban las plantas con la raíz sumergida en el agua cerca de un flujo de agua de aluvión, aguas cargadas de oxígeno proporcionado por el propio movimiento y llenas de nutrientes por el arrastre de sales minerales, con lo que se obtenían una solución nutritiva natural.

Fue en el siglo XX y concretamente durante la Segunda Guerra Mundial cuando el cultivo hidropónico adquirió gran protagonismo. Diferentes ejércitos instalaron invernaderos hidropónicos para reducir los costes de abastecimiento de sus tropas cuando estaban desplazadas, siendo los americanos durante la invasión de Japón los que más utilizaron esta técnica y la popularizaron.

Así pues, el concepto básico es muy simple, cuando las raíces de la planta están en un medio con agua en movimiento absorben el oxígeno muy rápidamente. Cuanto más oxígeno, más capacidad de absorción muestra la planta, lo que se traduce en un mayor desarrollo. Si el contenido de oxígeno es insuficiente, el crecimiento será más lento.

Distintos tipos de sistemas hidropónicos

Dentro de los sistemas hidropónicos, podemos hacer dos grandes grupos, unos donde se incluyen los que la raíz de la planta crece directamente en una solución nutritiva, y otros donde las raíces crecen en un medio inerte pero se riegan con una solución de nutrientes.

Con la raíz en agua:

  • DWC (Deep Water Culture): es el sistema que desciende de la hidroponía antigua, además de uno de los más sencillos. Consiste en un depósito lleno de solución nutritiva sobre el que se coloca una bandeja perforada donde se alojarán las plantas. En estos sistemas no se bombea el agua a las plantas, sino que las raíces están directamente en contacto con la solución nutritiva. Requieren una pequeña bomba de aire para oxigenar el agua ya que, al no recircular, se consume muy rápido el oxígeno. Las macetas Horti-Pot son uno de los sistemas más empleados.

DWC

  • NTF (Nutrient Film Technic): se trata de disponer las plantas en tubos de PVC o macetas, por las que por medio de una bomba de agua se hace discurrir una película de solución nutritiva, de modo que las raíces de las plantas dispongan de un suministro constante en un flujo recomendado de 2 l/min. El agua sobrante, es devuelta al depósito para ser reutilizada. Pese a ser uno de los sistemas más eficaces, un simple fallo eléctrico puede ser fatal por deshidratación de la raíz.
  • Aeroponía: es la evolución de los sistemas hidropónicos. Se trata de regar las raíces de las plantas por medio de nebulizadores o pequeños aspersores situados bajo el nivel de las plantas. Estas micro gotas saturadas de oxígeno provocan un super-desarrollo radicular y aéreo muy superior a cualquier otro sistema hidropónico. Por lo demás, no es muy distinto de un NFT en cuanto a funcionamiento. Sin duda el Dutch Pot Aero fue el sistema más famoso, ahora sustituido por su evolución, el Panda Aero.

Panda Aero

Con la raíz en sustrato

  • Sistemas de goteo: es unos de los más versátiles, ya que permite emplear cualquier tipo de sustrato. Básicamente el agua es bombeada desde el depósito hasta cada una de las plantas, donde un gotero se mantendrá encargado de suministrar lentamente la solución nutritiva. El sobrante es drenado de nuevo al depósito para su reutilización. Sin duda son los sistemas hidropónicos más empleados y de los más sencillos de usar. Los Panda Hydro o los sistemas Wilma son algunos de los equipos más populares.
  • Sistemas de inundación y drenaje (Ebb&Flow): consiste en situar las plantas en bandejas que contienen la solución nutritiva durante el riego y funciona de una forma muy sencilla: la solución nutritiva del depósito, es bombeada a la bandeja donde se encuentran las plantas en sus macetas. La bandeja se inunda, las macetas entran en contacto con la solución nutritiva y las raíces absorberán los nutrientes necesarios durante un espacio de tiempo. La solución nutritiva restante es drenada de nuevo al depósito para ser reutilizada en el siguiente ciclo de riego.

  • Sistemas de inundación sin retorno: muy similares en funcionamiento que los anteriores, un depósito con solución nutriente inunda una bandeja pero este agua no regresa al depósito, si no que es consumida en su totalidad por la planta. También son muy versátiles, ya que se puede usar cualquier tipo de sustrato sin miedo a que pueda obstruir bombas o conductos. El sistema más conocido es el AQUAvalve de AutoPot, además de que no usa ningún tipo de corriente eléctrica o batería.

Mención aparte merece la Acuaponía, una de las últimas técnicas que se ha puesto de moda, la unión de los mundos del cultivo hidropónico o hidroponía, y la acuarofilia o acuicultura. Los peces de agua dulce generan gran cantidad de nutrientes en sus ciclos alimentarios, los suficientes para que plantas acuáticas se desarrollen. El agua de los acuarios se puede hacer recircular por un sistema hidropónico de raíz desnuda o con sustrato, donde las raíces de las plantas de marihuana ejercerán de filtro biológico, alimentándose de los deshechos de los peces y devolviendo agua oxigenada al acuario y con menos concentración de nutrientes. El problema de carencias de cierto nutrientes son difíciles de controlar por otro lado. Este sistema hidropónico, usado sobretodo para el cultivo de hortalizas, goza de gran popularidad por ser cultivos totalmente orgánicos y ecológicos.

Ventajas y desventajas del cultivo hidropónico

Las ventajas son obvias. La primera es un total control de la solución nutriente que mejora el crecimiento y la producción. El ahorro de agua, pese a lo que pueda parecer, es muy importante puesto que no se desperdicia casi nada. Los cultivos son más rápidos al ser las tasas de crecimiento mucho mayores. La oxigenación constante del medio también se traduce en un desarrollo abusivo de las raíces.

Otras ventajas son la ausencia de plagas típicas de otros sustratos como coco o tierra, además de que también se reducen los riesgos del ataque de hongos patógenos a las raíces. Se usan dosis de abono bajas y que al estar distribuidas de manera disuelta y uniforme, su asimilación es más rápida. Los problemas de excesos o carencias de nutrientes se solucionan muy fácilmente y de manera muy rápida. Y es el sistema de cultivo más limpio que existe.

Como desventajas del cultivo hidropónico, la inversión inicial es lógicamente más elevada que unas cuantas macetas y unos sacos de tierra. Tanto los valores de pH como de EC no permiten mucho margen de error. También mientras en tierra podemos olvidarnos durante días de nuestro cultivo mientras no les falte agua, los sistemas hidropónicos no permiten estas licencias y la solución nutrientes precisa de una máxima atención.

Breves consejos sobre el cultivo hidropónico de marihuana

El cultivo en hidroponía como dijimos no acepta mucho margen de error en cuanto al pH y la EC, por lo que difícilmente se concibe un cultivo sin medidores de pH y EC. Si son continuos, con una simple mirada a la pantalla conoceremos los valores de la solución nutritiva del depósito. Si son los típicos de lápiz, conviene hacer mediciones cada día para comprobar que no existan fluctuaciones o los niveles de nutrientes caigan.

El pH ideal en la fase de crecimiento en este tipo de cultivos oscila entre 5.5 y 5.8. En floración, de 5.9 hasta 6.2, garantizándo así que la planta tenga todos los nutrientes en rangos apropiados para su asimilación. Lo mejor es siempre comenzar con un pH de 5.5 e ir gradualmente subiendo hasta los valores máximos recomendados para cada ciclo.

La EC indicará el contenido de sales disueltas en el agua. Lo ideal es comenzar con un agua con un bajo contenido en sales, como puede ser de osmosis, destilada o de mineralización débil. Después se debe añadir algún complejo de Calcio y Magnesio hasta alcanzar unos valores aproximados de 0,40 ms/cm2, para a partir de ahí añadir los fertilizantes hasta los valores recomendados.

La EC recomendada dependerá en gran medida de la variedad de marihuana, de la temperatura de la solución nutriente y del fabricante de abonos. Como referencia se usa 0,80 en crecimiento y 1,6-1,8 en floración. Si algo tiene el cultivo hidropónico como comentamos, es total control sobre la nutrición de las plantas así que, dependiendo de la variedad, buscaremos las dosis de fertilizantes apropiada, siempre con cambios ligeros en ellas. Si se ve que las plantas se resienten, basta con añadir un poco de agua limpia al tanque para conseguir de nuevo unos valores más bajos y más cómodos.

La temperatura de la solución nutriente debe estar en torno a los 20º, siempre mejor un poco por abajo que por arriba, ya que cuanto más alta la oxigenación de las raíces es menor. Como también comentamos, el aporte de oxígeno es vital, así que una pequeña bomba de aire en el tanque de nutrientes es indispensable. Los sistemas de recirculación oxigenan el agua durante el trayecto, aunque nunca está de más contar con un aireador conectado a una o unas piedras difusoras.