A la hora de comprar un vaporizador, es normal que surjan numerosas dudas sobre cual se adaptará realmente a lo que se busca. El mercado nos ofrece infinidad de modelos que en ocasiones, lo único que consiguen es confundir cuando se comienzan a comparar las características de varios. En este post trataremos de ayudarte en la elección. O al menos a reducir la búsqueda.
Es lo que más va a reducir la búsqueda. Para muchos es el factor más importante a la hora de comprarse un vaporizador. Hoy en día los precios oscilan entre los 50-60 euros hasta los más de 700 euros. Lógicamente en las calidades de unos y otros hay diferencias, tanto de materiales como del vapor obtenido. Pero barato no significa malo, por ejemplo el vaporizador Vital es el modelo más vendido del mundo y uno de los más baratos.
Pero sí, en ocasiones lo barato sale caro. Hoy en día se pueden encontrar copias y falsificaciones de cualquier modelo. Y en algunos casos en lo único que se llegan a parecer es en la apariencia exterior, cuando lo más importante es su interior. Personalmente prefiero un vaporizador de gama media de cualquier fabricante reconocido como X-Vape o CloudV, a una copia de un vaporizador de gama alta, aún teniendo que pagar más.
La siguiente pregunta que te deberías hacer, es qué uso le darás. Es decir si lo quieres sólo para usar en casa, que en ese caso la mejor opción es un vaporizador de sobremesa. O por el contrario tienes pensado llevarlo encima y usarlo donde te apetezca, que en este caso necesitarías uno portátil.
Los de sobremesa son dispositivos más pesados y de mayor tamaño. Ésto también permite que su mecanismo pueda ser más complejo. Sin duda el más famoso de todos es el Volcano, un vaporizador de gama alta y conocido por la función de llenado de grandes globos de vapor. El Arizer Extreme-Q es bastante similar y más económico, aunque la diferencia de calidad claramente se posiciona a favor del Volcano.
Los portátiles son como su nombre indica, pequeños vapos para llevar si es preciso siempre encima. O no tan pequeños en ocasiones. Pueden ir desde un tamaño de una barra de labios como el X-Vape Vixen, un vaporizador para concentrados de los más discretos, a más grandes como el Mighty, sin duda el mejor portátil pero incómodo de llevar en un bolsillo. Por su tamaño, suelen ser más limitados en cuanto a la vaporización, lógico por otro lado. Modelos como el Pax3 o el IQ están en la gama alta a precios competitivos.
Si eres habitual de las hierbas y concentrados, puede que la mejor opción sea una vaporizador que sea compatible con ambos. No todos cuentan con esta característica, lo que reducirá aún más tu búsqueda. Tampoco necesariamente los que vaporizan hierbas y concentrados son los más caros que los que vaporizan exclusivamente hierbas o exclusivamente concentrados. Por ejemplo el X-Max V2 Pro es un vaporizador de gama media con un precio muy bajo. Aunque sin duda el mejor en todos los aspectos es el Mighty, uno de los hermanos pequeños del Volcano.
El calentamiento de la hierba los vaporizadores lo pueden hacer de 2 maneras. Por conducción o por convección. Y podríamos añadir una tercera que es la mezcla de ambas. En el caso del calentamiento por conducción, la hierba se calienta por contacto con el elemento calefactor. Son en general vaporizadores más baratos que los de calentamiento por convección, aunque la incorporación de materiales como la zirconita en el caso del IQ, ofrecen una calidad del vapor muy similar.
Los de convección, emplean un flujo de aire caliente en lugar de calentamiento por contacto. El vapor sin duda es mucho más puro y agradable. Aunque esta diferencia se ha ido reduciendo con el paso de los años y en la actualidad la calidad del vapor resulta muy pareja, todavía hay ése punto de diferencia. El famoso Volcano es uno de los vaporizadores de convección más reconocidos, mientras que sus hermanos pequeños y portátiles Mighty y Crafty emplean la mezcla de convección y conducción, lo que los hace de los mejores, sino los mejores en la categoría de portátiles.
Éste no es un aspecto muy importante, pero merece hablar de él. Los vaporizadores que funcionan a una única temperatura ya escasean, y lo normal es encontrarnos con modelos que regulación de temperatura grado a grado, y modelos con temperaturas predefinidas. Las diferencias son muy pocas, y pueden reducir costes tanto de fabricación como por parte del usuario.
La regulación grado a grado permite al usuario vaporizar a una temperatura exacta. Por ejemplo en un rango de 180 a 190º, puedes seleccionar cualquiera de las temperaturas intermedias. Los vaporizadores con temperaturas predefinidas cuentan normalmente en intervalos de unos 10º, alguno más y otros menos. Por ejemplo sólo contarían con las temperaturas 180-190-200-210 y 220º, o 185-200 y 215º, o muchas otras combinaciones, con más o menos rangos…