En nuestro anterior artículo CÓMO CONSEGUIR COGOLLOS GRANDES Y RESINOSOS, os hemos explicado los pasos a seguir para el cuidado y la alimentación de plantas en floración y cómo sacarles el máximo rendimiento. En este post vamos a contaros cual es el mejor momento para cosechar y conseguir unos cogollos con una máxima potencia y el mejor sabor que se les pueda exigir.
Tras varias semanas de cuidados e impaciente espera, poco a poco se acerca el día de la cosecha de las plantas de marihuana cultivadas en exterior, que dependiendo de su genotipo y fenotipo, la floración se puede prolongar durante varias semanas más o incluso meses para las variedades más sativas. En cultivos de interior o con fotoperíodo controlado, debemos hacer caso al tiempo de floración que marcan los bancos de semillas para sus variedades, las cuales son muy orientativas.
Siempre se dice que cuando las plantas de marihuana tienen el 80% de los pelitos marrones, es el momento de cosechar. este es un dato no del todo fiable, ya que los pistilos o pelitos se pueden quemar o poner marrones por varios motivos lo que nos puede llevar a cortar la planta demasiado pronto con lo que no conseguiremos sacarle todo su potencial. Lo ideal y recomendado, es usar un MICROSCOPIO o una LUPA con suficientes aumentos que nos permitan ver los tricomas, que son las gotas de resina que cubren los cogollos y donde están contenidos la mayor parte de los cannabinoides y terpenos. Éstos van adquiriendo distintas tonalidades hasta su maduración, pasando de transparentes, a un color lechoso y finalmente a un color ámbar o anaranjado. Cuando observemos los tricomas y los veamos en su mayoría blancos o lechosos, es el momento de hacer el importante lavado de raíces, el primer paso previo a la cosecha. Con ésto, nos aseguramos que el sustrato quede libre de nutrientes, forzando a la planta a consumir el alimento que conserva en sus hojas. Así nos vamos a conseguir unos cogollos con un mejor sabor, ya es que es la materia vegetal una de las causantes de que la hierba chisporrotee o nos rasque cuando la fumemos. El lavado de raíces se debe hacer aproximadamente 10 días antes de cosechar con el triple de agua que la capacidad de la maceta, por ejemplo para macetas de 10 litros lo recomendado serían 30 litros de agua. En Cannabislandia disponemos de productos de aclarado como FINAL FLUSH de Grotek, que disuelve y precipita las sales residuales para con un simple riego abundante sean expulsadas por el drenaje, reduciendo considerablemente la cantidad de agua que se usa en los lavados así como su efectividad.
El momento óptimo de la cosecha dura unas dos semanas que es cuando la planta alcanza su máxima potencia y la concentración de THC es mayor. Cuando con una lupa o microscopio comprobaremos los cogollos de las partes altas de la planta y cuando veamos que los tricomas están de color lechoso y alguno ya adquiriendo tonos ámbar, será el momento ideal.
Preferiblemente se debe cosechar tras un día de sol y a ser posible sin que la planta esté humedecida por el rocío de algunas zonas a estas alturas del año, puesto que hongos como la botritis se desarrollan muy bien en estas condiciones e incluso en el secado pueden afectar a la cosecha.
En cultivos de exterior sobretodo, es muy común que mientras las zonas superiores de la planta están maduras, los cogollos inferiores aún no, por éso es preferible ir cosechando aquellas ramas que estén maduras e ir dejando que el resto siga evolucionando. En cultivos de interior ésto suele suceder menos y cosecharemos toda la planta a la vez.
A estas alturas ya deberíamos haber previsto un buen lugar de secado, lo ideal un sitio oscuro, seco y bien ventilado en donde podamos colgar las ramas boca abajo. Una excelente opción son los ARMARIO DE SECADO, que proporcionan unas condiciones óptimas. En nuestro siguiente post sobre el secado y el curado, os daremos los mejores consejos para que todo el trabajo dedicado durante meses sea lo más provechoso posible, no os lo perdáis!