En este post os vamos a hablar sobre el Oídio o también conocido como moho gris o blanquilla. El Oídio se trata de un hongo parásito de la familia de las erisifáceas que ataca las partes aéreas de las plantas, siendo cada vez más común su aparición tanto en cultivos de exterior como de interior. Sus micelios viajan por el aire y muchos de los árboles de nuestro entorno sean parques o bosques están infectados con este hongo, así que los contagios en nuestros cultivos se podría decir que están a la orden del día. Como la mayoría de los hongos, se desarrolla mejor en climas húmedos y templados. Puede ser un hongo letal si no lo tratamos a tiempo, aparte de que no es recomendable el consumo de cogollos infectados con Oídio.
-
-
- Características: el Odío es muy fácilmente reconocible, pues se presenta como un polvillo blanco o grisáceo sobre las hojas, como talco o azúcar glaseado, y que si pasamos el dedo lo quitaremos. Las manchas tienen normalmente forma circular que se va extendiendo uniformemente por todas las hojas. Los micelios transportados por el aire se depositan en la planta y esperan la ocasión idónea para desarrollarse y que puede tardar meses. Con temperatura superiores a 15º y ambiente húmedo, los micelios comienzan a crecer a una gran velocidad, pudiendo en muy poco tiempo cubrir todas las hojas de las plantas del típico polvillo blanco tan letal si no tratamos a tiempo. Las temperaturas altas impiden su desarrollo, por lo que en verano es muy complicado que se presente. A diferencia del MILDIU que también se presenta como un polvillo, el Oídio no penetra el tejido vegetal si no que se desarrolla sobre él, por lo que un fungicida suele ser suficiente cuando lo hemos detectado en nuestras plantas.
- Detección: como siempre, las revisiones periódicas son muy importante, y después de conocer las características, se ha de prestar más atención en ambientes templados y húmedos, sea en interior o exterior. Como ya dijimos, se presenta en las hojas, por lo que debemos observar bien cualquier cambio de coloración que se produzca, pues puede ser un primer síntoma. Si vemos una mancha como la descrita y al pasar el dedo la eliminamos, es hora de empezar a tomar medidas.
-
-
- Daños: las zonas atacadas se vuelven amarillas y terminan secando debido al bloqueo de la fotosíntesis. Los ataques a los cogollos destruyen los cannabinoides y su consumo es perjudicial para la salud. Se propaga muy rápidamente en ambientes poco ventilados, a lo que si sumamos una humedad superior al 60-70% y unas temperaturas entre 18 y 26º, su avance puede ser letal, pudiendo en muy pocos días contagiarse un cultivo entero y en pocas semanas terminar con él completamente. Siendo muy fácil tanto su prevención como su control, si ahora vez que tus condiciones climáticas son las ideales para el desarrollo del Oídio, no dudes en tomar las medidas oportunas para que este hongo no sea un problema.
- Tratamiento y control: el Oídio al no penetrar en el tejido vegetal si no que se desarrollo sobre él, es muy fácil mediante un preventivo asegurarnos de no padecer infecciones. Un muy buen producto con el que evitaremos infecciones de este hongo es PROPOLIX, 100% natural elaborado con propóleo de abejas, eficaz contra todo tipo de hongos y bacterias. Los preventivos debemos usarlos regularmente durante todo el cultivo, pero si optamos por no usar nada y sufrimos un ataque, tenemos que valorar qué usar dependiendo de la fase en la que se encuentre la planta. Si estamos en crecimiento, podremos usar un fungicida químico como Domark EVO que siempre será más rápido y eficaz; si estamos en floración, podremos usar COLA DE CABALLO o el propio PROPOLIX y que podremos aplicar hasta casi la semana de la cosecha. Las zonas afectadas por Oídio, quedarán de un color amarillento y pueden secarse aunque el hongo ya lo hayamos eliminado, es algo normal y las consecuencias de su ataque.
Como siempre, es muy importante la limpieza. En interior tenemos que eliminar todas las hojas muertas y la zona de cultivo mantenerla impoluta. Podemos poner un filtro que reducirá enormemente la entrada de cualquier agente maligno del exterior, como polvo y las propias esporas o micelios de Oídio entre otros. La ventilación es muy importante tanto para impedir que se desarrolle, así que un ventilador en el cultivo es primordial. Un ozonizador sería una opción muy interesante, ya que tiene cualidades bactericidas, microbicidas y esterilizantes, aparte del conocido poder de eliminar los olores. En exterior debemos mantener la zona próxima a las plantas limpia de malas hierbas o maleza. Si realizamos aplicaciones con algún preventivo, también podremos hacerlo en los árboles o arbustos cercanos. Rosales, claveles, manzanos, vides, calabazas… son muy susceptibles al contagio de este hongo tan letal, así que tengámoslo en cuenta si plantamos cerca.
Esperemos que todo ésto te haya servido de ayuda para conocer mejor el Oídio y cómo reconocerlo. No te pierdas en nuestros siguientes post los distintos hongos que pueden afectar a nuestras plantas de marihuana, como el MILDIU, BOTRYTIS o FUSARIUM y si tienes cualquier problema en el cultivo, consulta a nuestra a nuestros profesionales de Cannabislandia y entre todos te daremos la mejor solución a tu problema sea el que sea.