Hace unos años se publicaba la interesante noticia basada en un estudio donde se afirma que el mango, una de las frutas tropicales más famosas, comunes y deliciosas, intensifica los efectos de la marihuana. La explicación se encuentra en su gran contenido en mirceno, un carbohidrato monoterpénico lineal que ayuda al THC a pasar por la barrera hematoencefalica hasta 4 veces más rápido, lo que contribuye a potenciar y alargar de los efectos psicoactivos de los cannabinoides.
Combinar marihuana y mango es por lo tanto una gran idea, y en este post os enseñamos a hacerlo de una manera más original y refrescante, con un cóctel burbujeante y con una cantidad mínima de alcohol, que siempre puedes aumentar según tus gustos.
La tintura de marihuana es un método para conseguir extraer los principios activos de la planta por medio de la maceración en alcohol. Puedes visitar nuestro anterior post donde explicamos como hacerla, o con 4 gramos de cannabis y 100 ml de alcohol como puede ser vodka, brandy o ron, puedes hacerla fácilmente. Nosotros te sugerimos ron. La tintura necesita unos 25-30 días de maceración.
Comenzamos pelando los mangos y cortándolo en pequeños dados, simplemente para facilitar la tarea de licuarlos con una licuadora o batidora. Añadimos el zuño del mango y el azúcar al mango, y batimos bien hasta conseguir un puré ligero, sin ningún trozo de fruta.
Añadimos las 4 cucharadas de esta tintura cannábica al puré de mango, azúcar y zumo de lima, y con unas varillas mezclamos ligeramente hasta integrar la tintura completamente al puré, y guardamos en la nevera. Se debe consumir preferiblemente muy frío y con hielo.
A la hora de servirlo, se combinan en un vaso 2-3 cucharadas de puré de mango y marihuana, unas hojas de menta, hielo picado, y se añade la soda de sifón hasta llenarlo. También se puede usar tónica o agua mineral con gas. Si sobra puré, se puede conservar en la nevera durante 4 o 5 días para otra ocasión.
Como siempre que se trata con marihuana ingerida, hay que tener precaución, pues tiene unos efectos muy retardados y hasta pasada una hora son inapreciables. Es muy fácil pasarse con la dosis sin ser consciente de ello. Medio gramos de marihuana ingerida es una dosis más que respetable, si es la primera vez incluso la mitad podría llegar a ser suficiente. Con un poco de experiencia, será muy sencillo encontrar la cantidad perfecta.
