Cannabislandia

En España, Paraguay, Italia, Rumanía, Colombia, Ecuador, Suiza, Irán o Rusia, el consumo de marihuana está despenalizado, en algunos incluso se permite el cultivo para uso personal con todo lo que conlleva a veces el tener que demostrar que efectivamente es para consumo personal. En otros como Estados Unidos o Australia, es legal o despenalizado en algunos Estados. En Brasil, la India, algunas zonas de Pakistán, Nepal o Camboya es ilegal pero consentido en gran parte para uso «espiritual». Algunos otros, como mismo otras zonas de Pakistán y otros países de Oriente Medio, pueden traer hasta penas de muerte, un poco exagerado por fumarse un porro. Pero sin duda alguna, los países más permisivos y que nos llevan algo de delantera en cuanto a cultivo/consumo/tenencia son:

• México: en octubre de 2015 y por primera vez en la historia, entraba legalmente en el país un derivado de cannabis con fines medicinales para Grace, una niña de ocho años que sufría a diario graves ataques de epilepsia. En diciembre las autoridades sanitarias autorizaron el cultivo y consumo de marihuana con fines recreativos a cuatro ciudadanos que ganaron un amparo presentado ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Y estos días se debate en La Cámara de Diputados sobre la legalización de la marihuana con fines recreativos, tanto su posesión, como transporte y cultivo. Aunque aún tiene que pasar por el Senado, es muy posible que nuestros amigos mexicanos pronto puedan brindar orgullosos con un buen tequila y unos buenos porros.

• Corea del Norte: en un país donde lo único que vale es la palabra del líder, quizá fumar marihuana sea uno de los pocos placeres de los que puedan disfrutar los pequeños norcoreanos. Jamás ha habido una consulta popular sobre la marihuana y de hecho es una palabra eliminada de sus diccionarios («consulta popular» me refiero). Y como al amado líder le gusta llevar la contraria, pasa de las leyes internacionales y ni la marihuana ni el opio son consideradas drogas, por lo que es legal su consumo, cultivo y venta. Con dos cogollos. Éso si, si por cualquier extraña circunstancia se te ocurre viajar a Corea del Norte, mejor que fumes todo lo que tengas que fumar antes de entrar y te esperes para volver a fumar cuando hayas salido, por lo que pudiera pasar.

• Uruguay: se convirtió en el 2013 en el primer país en el mundo en legalizar la producción, venta y consumo de marihuana, pero con ciertas restricciones. Los consumidores se tendrán que registrar en el Instituto de Regulación y Control de Cannabis (IRCC), un organismo público encargado de otorgar licencias. También la legislación permite la compra de hasta 40 gramos de marihuana al mes en farmacias. El cultivo personal es legal hasta seis plantas de cannabis por hogar y se prohíbe que la droga sea publicitada así como fumar en espacios públicos cerrados. Una gran iniciativa impulsada por el presidente de la nación en aquellos años, José Mújica, quien llegó a declarar que “La lucha contra el tráfico de drogas está perdida a nivel mundial” y por ello “buscamos alternativas”.

• Desde el año 2001, Portugal posee una de las políticas sobre drogas más progresistas del mundo, ya que despenalizó la posesión de cualquier droga para autoconsumo, con límites claro. Por ejemplo una persona puede llevar encima hasta 25 gramos de marihuana o 5 gramos de hachís sin que lo detengan ni sancionen, aunque es posible que le «receten» un curso de rehabilitación. Con ésto, se ha conseguido reducir en un 50% de adictos a otras drogas entre otros a la heroína, un grave problema que arrastraban nuestros vecinos y que estaba lacrando a buena parte de una generación. En cambio es cultivo es totalmente ilegal y aunque sea en pequeñas cantidades para autoconsumo suele conllevar pena.

• En Estados Unidos, los estados de Colorado, Washington, Alaska y Oregón así como el distrito de Columbia, legalizaron su uso recreativo y algunos de los otros estados permiten el uso medicinal. Incluso en un estado tan conservador como llega a ser Texas, el parlamento republicano legalizó el uso medicinal del aceite de cannabis. Ohio, en cambio, votó recientemente NO a la normalización de la marihuana y próximamente tendremos noticias de más estados donde se planteé la legalización. Como dato, a finales del año 2015, se supo que el tráfico de marihuana en USA venida en su mayor parte de México, descendió notablemente ante el aflojamiento de las leyes. No cabe duda que para muchos países europeos, es una gran noticia lo que suceda en Estados Unidos.

• En Bangladesh no existe una ley que regule de forma específica el cannabis, por lo que su consumo no se considera ilegal y con el opio forma parte de su tradición. Este pequeño país de un tamaño menor que Uruguay y algo más grande que Grecia, es el 7º más poblado del mundo, con más habitantes incluso que Rusia o Japón pero con grandes selvas tropicales y zonas como Rajshahi, Jamalpur, Naogaon y Nerrokona donde se cultiva marihuana salvajemente y no tanto. No hay problemas para comprarla en cualquier mercado, si la escasa policía te dice algo con una simple moneda seguirán su camino. Todas sus fronteras son con la India salvo una pequeña región con Myanmar, siendo un pequeño paraíso lleno de misticismo… y marihuana.

• Canadá fue el primer país del mundo que habilitó un sistema legal para regular el uso médico de la marihuana. Las personas enfermas que lo deseen, pueden recibir un permiso del gobierno con el que pueden usar marihuana de manera legal. En cambio tanto la producción comercial y venta es ilegal, aunque a lo largo de este año 2016 y según anunciaron miembros del gobierno de Justin Trudeau, «adoptaremos medidas legislativas que regularán y legalizarán el uso lúdico de la marihuana y limitarán el acceso a ella», pasando a ser el primer país del Grupo de los 7 (G7) en tomar una medida de tal calado. Se espera que las ventas de marihuana medicinal inyecten miles de millones de dólares en las arcas canadienses.

• En Holanda es ilegal pero está despenalizado para consumo personal y en sitios autorizados. La realidad es que el consumo personal de menos de 5 gramos y la venta de pequeñas cantidades en los coffee-shops no se suele investigar pero tampoco se puede decir que esté permitido y se suele hacer la vista gorda. El cultivo es delito pero se tolera hasta 5 plantas para uso personal y con limitaciones en cuanto al equipo eléctrico que se emplea. En cambio la prescripción de cannabis medicinal sí está permitido y cualquier médico puede recetar marihuana. En los últimos años, el gobierno ha establecido una campaña contra el «turismo de marihuana» y en algunas zonas ya sólo se permite la venta en los coffe-shops sólo a residentes. Los turistas suelen recurrir ahora a los camellos de la calle, con lo que ahora tienen dos problemas.

• En 2015, Michelle Bachelet, presidenta de Chile, firmó un decreto en el que oficialmente la marihuana sale de la lista de drogas duras en este país previa votación con un aplastante SI, para uso terapéutico. El Instituto Estatal de Salud Pública puede autorizar y controlar el uso de la marihuana, resina y tinturas para la elaboración de productos farmacéuticos, siempre bajo receta médica. Para Chile, el tercer mayor consumidor de cannabis de América latina, es un gran paso para la legalización, ya que de momento tanto la siembra, como la venta y el transporte sigue siendo ilegal, pero un 47% de los chilenos verían bien una legalización total para uso lúdico. Actualmente Chile posee la mayor plantación de marihuana legal de toda latinoamérica, una hectárea con unas 7000 plantas.

• En la República Checa la marihuana medicinal es legal si es prescrita por un médico, además de que se puede comprar en farmacias. Desde el año 2010 se despenalizó el cultivo de hasta 5 plantas para uso personal y aunque el gobierno prometió la legalización total, de momento han quedado en promesa. Se suele consentir la tenencia de pequeñas cantidades (más de 15 gramos puede llevar pena de prisión de un año) y en algunos bares de ciudades como Praga, se suele vender marihuana por debajo del mostrador y que suele ser ignorada y consentida por las autoridades. El cultivo de cannabis medicinal, llegó a las 17.000 hectáreas anuales y son numerosos los fabricantes de productos con CBD, tanto medicinales como para el cuidado del cuerpo, sin duda entre los mejores del mundo gracias a todas las facilidades que han dado para investigar.