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10 lugares o situaciones a las que no conviene ir fumado

Nos gusta fumar marihuana. Sino, no creo que ni tú estarías leyendo, ni yo escribiendo. Siempre es un buen momento para disfrutar un buen cogollo, solo ó en buenas compañías, tanto buscando alegrar cualquier momento del día o relajarse e irse a dormir, para cada situación se puede encontrar la variedad ideal. Pero también hay otras situaciones en las que es mejor abstenerse y guardar las formas. Te ponemos el ejemplo de 10:

En un funeral no es buena idea, por ejemplo, presentarse fumado.  Vale que los ojos rojos los puedas disimular con el dolor sentimental del momento, pero no es el momento para chistes, bromas o cualquier tipo de comportamiento extraño que te hagan el centro de atención, como ponerse a ojear el libro de condolencias, arrancarle un trozo para el filtro del siguiente porro o hacerte selfies con el difunto.

Renovando el DNI tampoco es para ir fumado, sobretodo por la foto de tu documento para los siguientes años y será el que enseñes a las autoridades de cualquier país que visites, parecerás el fantasma de la mujer de la curva. Y, desde luego, llevarse un porro encima para fumárselo al salir es peor idea si cabe por la presencia siempre de hombres de uniformes que multan.

El día que conoces a tus suegros tampoco fumes. Si ya normalmente los suegros siempre reciben con reticencias, dar una imagen de demasiado gracioso o demasiado abstraído no es el mejor comienzo. Sabes que en cuanto te des la vuelta te van a criticar sea como sea, mejor no dar motivos. Quizá con el tiempo merezca la pena abstraerte cuando los visites, pero en un principio conviene guardar las formas.

Cuando vas de compras al super, sobretodo esos días que vas a comprar 4 cosas y no haces ni la lista de la compra. Llegas al super , no recuerdas nada de lo que tenías que comprar y, tras recorrer el laberinto de pasillos, terminas comprándote cualquier cosa que no necesitabas, obviando lo que realmente has ido a buscar. Que no falten unas chocolatinas, dulces o una gran tarta para llevar bien el bajón de llegar a casa y tener que volver. Acuérdate esta vez de llevarte la lista de la compra.

Antes de un examen, ya que la marihuana afecta a la memoria episódica a corto plazo y no hay ninguna evidencia clara de que afecte a la memoria a largo plazo. En unas horas puedes pasar de acordarte de todo lo estudiado a quedarte más en blanco que Hillary tras las elecciones. Espera a terminar el examen para celebrarlo con un porro si ha salido bien, o para olvidar el momento si es que ya sabes que tocará repetirlo.

En una entrevista de trabajo. Pues tampoco es un buen lugar para ir fumado, la impresión que puedas dar podría llegar a ser penosa. Por no hablar de que tu cara de muerto tampoco ayudaría a que en recursos humanos te tengan en cuenta entre los varios candidatos. Preséntate ágil de mente y con las ideas claras. En los tiempos que corren, que a uno le concedan una entrevista de trabajo, no es algo que ocurra todos los días.

Antes del examen de conducir ni que decir tiene, que es una pésima idea fumarse un porro. Ya si te subes al coche sin saber diferenciar los pedales o tu derecha de tu izquierda, difícilmente conseguirás seguir las indicaciones del examinador que, por otro lado, suele tener muy mala leche y ves por el retrovisor cómo va anotando todos tus pequeños fallos. Pequeños para ti que vas fumado, en el camino dejas 3 intentos de atropello, 5 colisiones y una farola en el suelo.

Y una vez tengas el carnet de conducir, tampoco. Ni es buena idea por tu seguridad, la de los que vayan contigo ni la del exterior, ni sale barato si en un control te sacan el drogotest y te mandan chupar el palito. Deja que conduzca cualquier amigo que ni haya fumado ni bebido y, lo más importante, que tenga carnet de conducir. Y si no lo hay, los taxistas también necesitan trabajar y llegar a fin de mes. Y sino, fúmate otro y olvídate de coche, taxista y viajes.. relájate.

En tu primera cita tampoco es buena idea presentarse fumado. Una noche que prometía ser especial se puede transformar en una pesadilla. Conversaciones incoherentes, risas sin venir a cuento, abstracción, torpeza… y el sábado sabadete finalmente termina solo solete. Ya habrá momentos para compartir marihuana con la pareja y no estropear un día que siempre se podrá recordar.

Antes de subir a una montaña rusa no deberías fumar, los vaivenes y los meneos no son el mejor aliado en estos casos y es fácil que puedas demostrárselo a los presentes. Lo bueno es que te puedes hacer famoso en un vídeo que alguien colgará en el YouTube donde se te vea salpicando de vómitos a todo lo situado en un radio de 10 metros. Lo malo que te conocerán como el «guarro de la montaña».